Altamente concentrado

El exsecretario de Energía Jorge Lapeña, manifestó su postura favorable a la desregulación total de los precios de los combustibles, aunque advirtió que aún son pocos los actores que participan en el libre juego de oferta y demanda.

En el marco de la discusión sobre las modificaciones de raíz que el nuevo Gobierno propone para los combustibles en Argentina, son numerosas las voces a favor de la desregulación de los importes en el pico de surtidor, pero existen diferencias y matices en cuanto a la modalidad de llevar estas acciones adelante y ciertos reparos relacionados a los resultados que impactarán en un futuro cercano sobre las bocas de expendio.

Al respecto, el exsecretario de Energía Jorge Lapeña señaló en diálogo con surtidores.com.ar, que si bien está de acuerdo con el sinceramiento de precios como concepto económico, es preciso a su entender, avanzar hacia un mercado competitivo para que esta medida sea efectiva.

Libre competencia: las petroleras ya no tienen restricciones para operar Estaciones de Servicio propias

En ese caso, recordó que en Argentina, la oferta mayorista de petróleo está concentrada en pocos operadores, lo que facilita los acuerdos entre ellos y puede distorsionar la competencia, que en consecuencia perjudica la posibilidad de que las Estaciones de Servicio puedan disputar sanamente entre sí.

En cuanto a los precios actuales, y a pesar de los aumentos sucesivos, el experto energético evaluó que aún están distorsionados, pero destacó que los balances de empresas petroleras indican que los valores del crudo permitieron ganancias significativas. Opinó que estos importes son competitivos para las empresas que operan en Argentina, al tiempo que criticó políticas como el Barril Criollo.

Análisis: Precios, competencia y desafíos en el mercado argentino de los combustibles

Para encauzar el mercado y salir del cepo, Lapeña propuso tomar como referencia los precios de exportación. Sugirió que los precios internos del gas deberían alinearse con los precios internacionales, utilizando a Estados Unidos como referencia.

Sin embargo, advirtió que los mercados energéticos argentinos no son competitivos y carecen de vigilancia por parte de organismos como Defensa de la Competencia. Describió esta cuestión como “imperfectos y altamente concentrados, influenciados por sindicatos, provincias petroleras y empresas productoras, con una pasividad del Estado que contribuye a la ineficiencia y la corrupción”.

Con estos conceptos, Lapeña postuló finalmente la necesidad de mejorar la competencia en el sector hidrocarburífero y tomar medidas para alinear los precios internos con las condiciones internacionales, a fin de promover un funcionamiento más transparente y eficiente, que acarreará beneficios económicos para las Estaciones de Servicio.